A los trece años vine con mi familia a Aguascalientes, donde vivo hasta la fecha, aquí fue donde en La Casa de la Cultura y de la mano del Maestro Rosales (qepd), tomé mis primeras clases de guitarra clásica. Más tarde formé, junto con mis hermanos Rocío y Fernando y otros buenos amigos, el grupo musical “Wando” con el que llegamos a ganar el primer lugar con una canción original en el festival “Valores Juveniles Bacardí” en el año 1993.

En ese tiempo llegué a tener hasta tres trabajos, tocando también en el restaurante Hacienda de La Noria, acompañando con la guitarra al salterista Julián Pacheco, donde aprendí mucho de música popular mexicana e internacional. al mismo tiempo era guitarrista de la legendaria Banda Safari donde tocábamos para todo tipo de eventos.

Una vez que Luis Miguel vino a cantar a Aguascalientes, busqué en el hotel a su guitarrista y director musical Kiko Cibrián (a quien he admirado toda la vida), para mostrarle algo de mi música y pedirle si podía darme clases de guitarra eléctrica, me dijo que no era posible porque estaba constantemente de gira, pero me pidió le dejara el demo que llevaba. De este modo la cinta pasó de mano en mano hasta llegar al productor José Quintana, quien se lo mostró por teléfono a Fher Olvera, vocalista de Maná.

Para mí fue muy importante la gira “Jalisco Power”, que hicimos en 2002 con Carlos Santana, tras su colaboración con Maná, en donde se destacó el tema “Corazón Espinado” que Fher compuso especialmente para el disco “Supernatural”. Tocar junto a uno de mis ídolos desde la niñez ha sido uno de los momentos más gratificantes de mi carrera.

Mis influencias como guitarrista han sido: Paco de Lucía, Vicente Amigo (Flamenco), Pat Metheny, Scott Henderson (Jazz), Steve Vai, Yngwie Malmsteen (Rock), Carlos Santana, Stevie Ray Vaughan (Blues), David Russell, Berta Rojas (Clásico), The Edge, Gustavo Cerati (Pop) y muchos más.